Locura y cordura

¿Quién dice quién está loco y quién está cuerdo? ¿cómo podríamos definir cordura y locura? ¿Cómo saber si estamos cuerdos o locos? Son preguntas que me hago para poder escribir sobre este tema tan poco hablado y controvertido. Se podría decir que la cordura es el equilibrio en todos los campos de la vida y la locura el desequilibrio en todos los campos de la vida. Mirándolo así tendríamos grados de cordura y de locura. Cuanto más equilibrio tengamos en las diferentes áreas de nuestra vida más cuerdos estaremos y cuanto más desequilibrio más locura. Mirando el mundo tal cual está ahora se podría decir que hay cada vez más desequilibrio. La sociedad se está volviendo cada vez más frágil y tendente al desequilibrio. Los apetitos más básicos son saciados con más intensidad y, por lo tanto, se crea una falta de resistencia a la saciedad de estos apetitos. Esa falta de resistencia nos hace frágiles y maleables, instintivos y cada vez menos cuerdos.

Se nos pueden inculcar ideologías totalmente ilógicas y traídas de los pelos y las seguimos y apoyamos sin dudar prácticamente. Nos estamos convirtiendo en marionetas de unos titiriteros muy oscuros que están llevándonos como al ganado a un matadero de la voluntad y del criterio propios. La intención parece ser, una vez estudiada la situación con cierta profundidad, el dominar completamente las mentes de los seres humanos para que, en un futuro no muy lejano, las voluntades y criterios propios ya no existan. Sólo las de unos pocos que estén en la cumbre la pirámide de poder. Estamos perfilando lo que ya Orwell perfiló en su momento con 1984, una dictadura tan férrea que sea imposible de zafarse de ella, ni siquiera en el pensamiento. Espero que esto nunca ocurra, porque es algo horrible a todas luces.

Pero si se ve lo que está ocurriendo ahora se percibe una tendencia masiva a dejarse llevar por las corrientes tecnológicas y sus “doctrinas” de pensamiento. Nos vamos enganchando cada vez con más fuerza a las diferentes redes sociales y sus maneras de operar en nosotros. Viendo reels o tiktoks que van moldeando, cada vez con mayor rapidez, eficacia y fuerza, nuestra forma de ver el mundo, de pensar, de relacionarnos, etc. Cada creador de contenido se esfuerza porque su contenido sea el más viral y atractivo, con lo que lo que vemos se va profesionalizando con el tiempo y esto se suma a la inteligencia artificial que hay detrás de los algoritmos que presentan el contenido. Creo que por esto la inteligencia artificial es gratuita en casi todos los casos, para facilitar este proceso de fagocitación del criterio y la voluntad propias y llegar así más rápido al objetivo de esclavizar a la humanidad por completo o, por lo menos, en su mayor parte.

Existe también una corriente de pensamiento que busca la libertad y está denunciando toda esta operación que es monstruosa y que lleva siglos o milenios gestándose. Somos seres humanos anónimos que denunciamos las violaciones a la libertad que están ocurriendo y que no queremos ver una bota pisando el cuello de la humanidad por toda la eternidad. Ojalá la cordura triunfe sobre la locura y logremos vivir una época dorada en la humanidad en la que la libertad y la coherencia sean la norma general y donde la alegría y el amor reinen.

Ian

Soledad

Escuchar mientras se lee…

Ver la pantalla en blanco antes de escribir. Escuchar música y dejarse llevar donde el título que has puesto te lleve. Soledad, una palabra, una vivencia, un sentir. Quizá lo más cercano al vacío si hablamos de verdadera soledad. Por ese vacío huye la gente de la soledad. Muy pocos la buscamos. Pero incluso quienes la buscamos, deseamos a veces compañía. La soledad es, al final, el estado natural de todos los seres. Las relaciones son esporádicas, duran una fracción de tiempo, pero la soledad está siempre con cada ser. Se puede estar solo rodeado de miles de personas o acompañado por uno mismo en un páramo perdido. O estar acompañado de mil demonios en pleno retiro espiritual y no poder soportar ese retiro. Hay muchas posibilidades, como siempre.

La posibilidad de la soledad buscada es una de las más interesantes para mí. Atreverse a estar solo y disfrutar de ello sin llegar a la fobia social es algo muy reconfortante. Está claro que somos animales relacionales. Necesitamos relacionarnos, pero, ¿hasta qué punto? Hoy en día, tal cual están las personas, las relaciones que se dan son muy vacías, demasiado cargadas de victimismo y de culpar a otros y centrar la atención y el foco en los problemas del mundo y no en los propios para solucionarlos. Esto crea una especie de vórtice atractor de malos pensamientos y actitudes que no son nada saludables. Es mejor estar solo que relacionarse con personas que funcionan con estas actitudes. Y yo mismo me relaciono con este tipo de personas de vez en cuando, es casi imposible no hacerlo porque el mundo está lleno de ellas. Muy pocas personas buscan profundizar en los asuntos del ser.

La cosa está difícil pero no imposible. Existe una corriente cada vez mayor de personas con inclinaciones hacia la mejora de uno mismo y la espiritualidad. Se pueden encontrar relativamente fácil por internet y se puede aprender mucho de ellas. Es una forma de pasar mejor la soledad que no se puede aguantar y llegar a la soledad buscada, una vez se comprenden ciertas cosas relacionadas con la búsqueda de uno mismo.

Ian

Octubre

Escuchar mientras se lee…

Comienza el mes del otoño, de la melancolía. En el hemisferio norte se acerca el frío. Es uno de los meses que más me gustan, por eso le hago un escrito. Tiene hasta sus propias películas. En octubre se pasa de libra a escorpio y el ambiente se vuelve más extraño. Se da el día de todos los difuntos (ahora mal llamado “Halloween”) el 31 de octubre.

Pero lo que me interesa de octubre es su halo de misterio. Algo tiene octubre que me recuerda en cierta manera a “Blade Runner” (y eso que no la he visto entera). O a los “Fraggle Rock” y sus incursiones por las cavernas interminables en las que vivían. Es el mes en el que las hojas de los árboles comienzan a tornarse marrones, rojizas o anaranjadas. A caer y crear mantos de hojas en las calles. Muchas personas terminan sus vacaciones de septiembre y deben incorporarse a sus puestos de trabajo. En muchos sitios, sobre todo del norte, hay que volver a utilizar ropa de abrigo y la lluvia se vuelve más habitual.

Al final, octubre es un convencionalismo humano que marca una sección del tiempo circular en el que estamos. Circular, cíclico y en espiral. No sé si espiral ascendente o descendente. Viendo lo visto semeja más a una espiral descendente, pero quién soy yo para juzgar eso a tenor de lo gigante que es el tiempo y lo minúsculo que yo soy. El tiempo y octubre son fractales de algo muy extraño que es la vida y sus manifestaciones. Se dan cíclicamente y en espiral y tienen momentos que llamamos “octubre” en los que me gusta estar, transitar y vivir…

Ian