Dejar Ir

La vida se resume en retener o en dejar ir. Las dos formas de actuar son antagónicas y complementarias. La primera hace que se llegue a la segunda, aunque sea porque nos llegue la muerte. El Dr. David R. Hawkins ha estudiado cómo debe uno dejar ir todas las retenciones en la vida para así llegar a estadios muy elevados de conciencia y poder afrontar el último dejar ir de la manera más ligera posible. Para ello hay que observar lo que se quiere dejar ir, hacer que aumente su presencia en nosotros como sentimiento (ya que todo termina codificándose como una forma de sentimiento) y el sentimiento mismo terminará por disiparse. No hay que llevarse a engaños, este proceso puede llegar a durar semanas o meses, dependiendo de lo enquistado que esté el sentimiento, pero normalmente con una sesión puede ser suficiente.

No me hagas caso a mí ni creas lo que te digo. Mejor investiga sobre el Dr. Hawkins y su metodología para liberarse y juzga por ti mismo. Probando podrás vivirlo en tus propias carnes, como se suele decir. Es importante también no caer en estas cinco formas de actuar ante algo que nos ancla y que queremos “dejar ir”:

1. Expresión. 

2. Huida o escape. 

3. Racionalización. 

4. Negación. 

5. Proyectar o culpar.

No debemos expresar la queja sobre lo que nos adolece. Tampoco huir o escapar usando alcohol, drogas o fiestas, etc. Evitar racionalizar el problema. Evitar también la negación del mismo y evitar, por último, proyectar sobre otros o culpar a otros de nuestros problemas.

Si logramos hacer esto, contemplar el problema sin juzgarlo, vivenciarlo y hacer que crezca y se disipe, habremos dejado ir el problema y, al igual que se arregla dentro, se arreglará fuera. Parece una película, pero es real, es como funciona la vida, además está “medido” y comprobado por miles de casos clínicos al respecto. Es una terapia que todo el mundo debería conocer y que puede cambiar el mundo humano tal y como lo conocemos.

Ian.

Escuchando un Duduk…

Pienso en ti. ¿En dónde estarás, qué estarás haciendo, con quién estarás?… ¿Estarás sola? ¿Cómo son tus pensamientos? ¿Qué sientes ahora que escribo esto? ¿Eres dichosa, como ahora se dice; feliz? ¿Te sientes arropada por la vida o estás en guerra con ella? No sé si alguna vez lo sabré. Si alguna vez podré estar contigo, adentrarme en tus misterios, volar juntos con la imaginación, reírnos, pasear por el campo, ir a la playa. No sé, tantas cosas.

Pero no puedo ilusionarme, lo que sí puedo y tengo es fe en que te encontraré. Y seremos muy felices juntos, muy dichosos. Prefiero la palabra dicha a la palabra felicidad. Es más dicha la que sentiría contigo. Felicidad me suena un poco a plástico, a campaña publicitaria. La dicha es más espiritual, más grandiosa. Toca más aristas de la situación que estoy describiendo. Tú y todo tu mundo. Tú y tus misterios. Describo el cielo en la tierra, viajar años luz sin moverse de la cama. Describo la pasión más loca contenida en una mirada.

Y puedo seguir, pero no quiero. Lo bueno si breve, dos veces bueno. Así que sí, ella y sus misterios que algún día formarán parte de los míos…

Ian.

¿Qué sentido tiene la vida?

Es algo que te habrás preguntado por lo menos una vez en la vida. Pero, ¿has encontrado una respuesta contundente? Seguramente no, porque creo que nadie tiene la respuesta a esta incógnita y si alguien la tiene está diluida entre miles de hipótesis y teorías al respecto. Cada quién piensa, a su modo, en el sentido de la vida por cómo vive. Está claro que hay ciertas cosas que son evidentes. Si cultivas lo más seguro es que recojas frutos, pero puede ser que no, si hay una inundación o algo parecido. Aún así, la vida tiene sus propias leyes.

La leyes están ahí, operando constantemente y se pueden deducir, pero ya están descriptas en el Kibalion. Un libro de sabiduría que compila las leyes que operan en el mundo. Estas leyes señalan directamente a algún tipo de inteligencia suprema que rige todo y ahí es donde entra el trabajo del Dr. David R. Hawkins. Todavía estoy estudiando su trabajo, pero puedo decir que se basa en la premisa de que rendirse a esa inteligencia suprema es la forma de liberarse de los problemas que, visto desde su óptica, nos generamos nosotros mismos por operar desde el ego. Cuanto más opera el ego por nosotros peor nos va en la vida.

Si puedes soltar y dejar ir cada sensación y pensamiento que no quieres y los entregas a esa inteligencia la vida comienza a equilibrarse y comienzan a ocurrir aquellas cosas que querías que ocurriesen, pero que desde el ego estabas “forzando” a ocurrir. El “truco” es dejar ir todo y entonces viene todo de vuelta. ¿Qué diferencia a una persona sana de una enferma? Lo que hace cada una, ¿verdad? ¿Qué diferencia a una persona rica de una pobre? Lo que hacen y la mentalidad que tienen. Alguien que se ha hecho a sí mismo como persona rica sabe volver a ello si se quedase en banca rota. Una persona pobre, si le tocan los millones, los gastará o mal invertirá y en poco tiempo no tendrá nada otra vez.

Al final estamos creando nuestra realidad lo queramos o no y la técnica del Dr. David R. Hawkins es muy interesante porque va al centro del problema y lo soluciona de raíz. Te recomiendo sus libros y puedes investigar sobre él en YouTube, por ejemplo.

Ian.