Auto imposición

Tengo la tarea autoimpuesta, y varias más que voy implementando paso a paso, de escribir en el blog todos o a casi todos los días. Primero porque me encanta escribir y luego porque es terapéutico. Hoy está siendo un buen día. He estado con una amiga mayor que lo está pasando un poco mal y hemos pasado un buen rato charlando de la vida. Las personas mayores no tienen por qué ser sabias. El aprendizaje es algo que depende de la voluntad y si no se tiene voluntad de aprender y de aplicar lo aprendido y de ahí derivar a tener sabiduría, entonces no se es sabio. Pero sí que es verdad que la edad da cierto conocimiento de cosas, sobre todo de los comportamientos humanos.

Se puede aprender mucho de esa área, sobre todo a quitarse un poco el peso tan grande de expectativas y esperanzas que nublan las relaciones naturales, digamos. De todas maneras, somos como un bloque de acciones y reacciones que es muy difícil de cambiar y tampoco tiene por qué cambiarse si te va bien. El tema es que a la mayoría de la gente no le va bien el bloque que ha incorporado y entonces lo mejor sería cambiarlo. Para eso hay que reeducarse, informarse de buenas fuentes y hacer los cambios. Pero es algo que cuesta mucho porque amamos como somos y, además, tenemos miedo a ser diferentes. Estos dos frenos hacen que una persona se estanque durante mucho tiempo (yo he estado y sigo ahí de alguna manera) en estados del ser y en formas de ser que no cambia porque tiene demasiado apego a esa forma de ser.

En cada cual los cambios son diferentes y a ritmos diferentes y, sinceramente, yo creo que todo esto es una especie de danza que tiene sus tiempos y que cuando cambias tu estado de ser es porque estabas en el tiempo de cambiarlo. Los tiempos son los que son y parece que no se puede hacer gran cosa por cambiar ese devenir de los acontecimientos. Quizá se puede seleccionar un devenir mejor, como dice el Reality Transurfing, podría ser. Yo he experimentado cambios drásticos en ciertos momentos de mi vida y otros momentos en los que los cambios parece que nunca se van a dar.

Total, que al final estamos aquí metidos en una especie de sopa y somos un ingrediente más y, llegado el momento, parece que vamos a ser comidos. Al final todo parece terminar siendo comido por una cosa u otra. Es un mundo depredatorio y voraz en el que vivimos…

Ian.

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