… y una ilusión. El mundo que ves lo estás soñando a cada instante, en el único instante que existe. ¿Por qué cambia? ¿Por qué se mueve? Ese es uno de los misterios más grandes de todos. En teoría no debería existir nada y, además, no debería moverse. Pero sin embargo se mueve, y no me refiero a la Tierra, que para mí está más que claro que es estacionaria, pero bueno, ese es otro tema.
La cosa es que la existencia existe y se mueve, cambia, muta y, también eso produce que todo sea efímero, inasible, marchito… Nada va a quedar, por mucho que nos esforcemos en querer crear un cambio “a positivo” todo se va a olvidar. Podremos marcar una era como mucho, pero lo que de verdad fuimos y lo que queda como poso sobre lo que fuimos dista mucho uno de otro. Imagino que habrás jugado al teléfono estropeado alguna vez. Pues imagina milenios de teléfonos estropeados.

Nada permanece. Hoy escribo esto en honor a una amiga y a su padre que lamentablemente ha fallecido hoy. Ha cambiado de estado, esta amiga mía y yo hablamos de muchas cosas relacionadas con este y otros temas que se tratan muy poco, la verdad. Y no sólo se tratan poco, sino que, encima, si quieres hablar de estas cosas te tildan de pesado rápidamente. Bueno, pues en honor a un padre con el que se podía hablar de estas cosas por lo que mi amiga me dice y en honor a ella, que es uno de los seres más bellos en todo ámbito que he conocido.

Por otro lado, lo efímero de la vida hace que las penas pasen y lo bueno se pueda saborear con un paladar más exquisito. Toda la fluctuación y variabilidad en las experiencias va produciendo cambios en nosotros, reorientando nuestras aparentes decisiones. Y digo aparentes porque parecen surgir de dentro. Del cúmulo de emociones, pensamientos, reacciones químicas, impulsos, sentires e intuiciones que se tienen a cada instante en este único instante que existe. Es muy paradójico todo.

Para terminar, decir que las eras, los eones y los Kalpas también son efímeros y que, si todo tiene principio y fin como parece que parece, el universo, el tiempo, el instante presente, también puede que tenga fin.
Paz para los hombres y mujeres de buena voluntad y dedicado queda (en secreto y de forma anónima) este escrito y esta música para el padre a mi amiga…
Un beso L.
Ian