Todos tenemos luz y sombra. Unos más de luz que de sombra y otros más de sombra que de luz, pero a fin de cuentas, todos tenemos de los dos. Imagino que con esto ocurrirá también como ocurre con el día y la noche. Habrá momentos de nuestra vida con más sombra y otros con más luz. Momentos más inspirados y momentos más decepcionantes. Sabiendo esto miro a mi alrededor e imagino cuantas sombras hay y las apariencias de la vida se opacan porque lo que solemos mostrar es nuestra luz, nuestro lado brillante.

Un ejemplo muy claro de ese lado brillante son las redes sociales. Ahí compartimos sólo lo bueno de nosotros, aquello que consideramos lo bueno de nosotros claro. Cada cual cree que está haciendo lo mejor seguramente y tal vez sea así, pero la cuestión es que con la globalización y todos los contrastes y comparaciones que se hacen entre unos y otros se está produciendo una brecha muy grande entre aquellos que son de la “élite” en cuanto a estatus, poder adquisitivo, fama e influencia y aquellos que no. Es más, se está produciendo un efecto contrario a esa búsqueda de estatus, fama e influencia y hay mucha gente que busca pasar desapercibida, no les importa estar denostados socialmente y por supuesto no quieren ni desean influenciar a nadie.
Esa brecha que se está produciendo nos está llevando a una sociedad controlada por unos pocos a todos los niveles (alimentación, salud, forma de pensamiento, etc.) que son los únicos que tienen acceso a una alimentación saludable de verdad, a una medicina que sana de verdad, etc. Ese control esperemos que se desmorone, pero por ahora está creciendo en influencia y dominación y con la IA más RRSS como Tiktok o IG se están modelando y moldeando las mentes de millones de personas día a día, paso a paso.

A veces pienso si lo que está ocurriendo en la actualidad es el sueño húmedo hecho realidad de los brujos antiguos Toltecas, que eran unos seres despiadados y ávidos de poder y control como nunca antes y después ha habido. Han conseguido hacerse con el mundo entero para poder acaparar mucho más poder en menos tiempo o a saber para qué. Seguramente para varias razones a la vez. Es una teoría mía, pero me cuadra bastante teniendo en cuenta las capacidades inauditas que poseían estos brujos que, usadas para lograr el control de un planeta, irían muy bien y las actuales macroempresas y lobbies de poder al final están dirigidas por unos pocos que, casualmente, suelen estar en las juntas de accionistas de las otras empresas y conglomerados comerciales.

Pero bueno, realmente no debe importarnos si el control dictatorial de este planeta está a manos de los brujos antiguos Toltecas o de los extraterrestres o de las logias, etc. etc. El curso de la historia humana está fijado y parece llevar un objetivo por ahora incognoscible, pero deberemos vivir las situaciones que tengamos que vivir debido al camino hacia ese objetivo o destino fijado. ¿Fijado por quién? Yo diría que por la nada que es la que está inmóvil y sin cambios, es el motor inmóvil del que hablaban los filósofos griegos. Y ese rumbo está ahí por la misma razón por la que sale el sol por la mañana y se acuesta por la tarde. Por la misma razón de las mareas o de los ciclos lunares. Por la misma razón que nos hace ser jóvenes al principio de nuestra vida y viejos al final de ella. Y, bueno, nadie sabe el porqué de este destino fijado, a dónde nos lleva, cuál es su fin, todo queda demasiado suelto, extraño, vago, imposible de asir…
Ian