¿Qué es la abundancia? ¿Cómo podemos saber si somos o no abundantes? Si lo medimos sólo por la cantidad de dinero que tenemos creo que se quedaría corto el asunto. Para mí hay gente que tiene mucho dinero pero que no es abundante en experiencia espiritual, por ejemplo. Gente que tiene menos dinero, pero que es plena y se siente plena con lo que tiene. No quiere decir que sean conformistas. También lo podrían ser, por qué no.

Quizá el punto de la abundancia es en qué se quiere ser más abundante ¿Sobre qué concentramos nuestra atención? La atención sólo se puede enfocar en una cosa a la vez. Podríamos tenerla dispersa en muchos focos diferentes en el tiempo, por lo que entonces no cosecharíamos nada concreto en abundancia, pues no hemos puesto nuestra atención en un tema concreto durante X tiempo. La hemos malgastado. Esto ocurre con las redes sociales. Hacen que nuestra atención se disperse, se pierda en un maremágnum de estímulos cambiantes que nos van drenando cuota de atención. Atención, que es al final como el jardinero que cuida del jardín propio, se tiene que cultivar también a su vez. Si nuestra atención es grande y está enfocada en un asunto concreto puede sacar mucho rendimiento de tal asunto y, por tanto abundancia.
El tema entonces de la abundancia nos lleva a tener que elegir en qué áreas de la vida queremos centrar nuestra atención. Qué queremos que crezca en nosotros mismos y, por lo tanto, fuera de nosotros mismos. Yo creo que lo más sabio sería buscar en qué queremos enfocar nuestra atención antes de enfocarla. O sea, enfocar la atención en la misma atención para que esta nos lleve a encontrar qué sería lo más óptimo en lo que enfocar nuestra atención. Una vez encontrado el asunto o asuntos en los que queremos enfocar nuestra atención, enfocarla con la máxima plenitud y organización en estos temas. Alejar nuestra atención entonces de la búsqueda inicial, cosa que costará un tiempo, y centrar la mayor cuota de atención en el descubrimiento realizado.
Cada vez que queramos tirar la toalla en este área que hemos tratado con nuestra atención recordaremos la búsqueda inicial y lo que nos costó encontrar ese camino y esto nos dará fuerzas renovadas. En realidad, si lo miramos bien, todo el mundo es abundante. Abundante en escasez se puede ser también. Centrar la atención en que somos escasos mantiene la escasez, hace que todo lo que pensemos, sintamos y hagamos vaya relacionado con esa escasez y nos mantengamos pues en escasez. Por tanto, como la naturaleza, los seres humanos somos abundantes porque somos naturaleza. Ocurre que los depredadores naturales de los seres humanos nos depredan de maneras en que no podemos percibir, en primera instancia, esa depredación. El depredador se nutre de nuestras energías bajas y para ello despliega un sin fin de trampas socialmente bien vistas que nos llevan a esas energías bajas. Y una de las energías bajas es la de la escasez, porque lleva asociadas muchas otras malas sensaciones o vibraciones.
La forma de zafarse del depredador y sus trampas es sencilla y a la vez muy compleja. Se trata de ser cada vez más impecable. O sea, dar nuestra energía y atención a actividades que nos empoderan y nos dan energía y retirar nuestra energía y atención de actividades que nos quitan la energía y nos denigran. Para identificar las actividades que nos quitan la energía y nos denigran debemos fijarnos en toda cosa que nos dé gratificación instantánea. Todas las actividades que son constructivas, nos empoderan y nos dan energía nos dan gratificación a largo plazo. Y para poder mantener las actividades constructivas y productoras de energía a largo plazo es recomendable instaurar un sistema de pequeñas gratificaciones una vez que se ha realizado la actividad X constructiva y energizante.
Esto es un resumen de mi idea de abundancia y las maneras en que podemos obtenerla. Teniendo en cuenta también qué tipo de abundancia queremos crear. Creo que lo interesante es buscar un equilibrio y generar una abundancia equilibrada en todos los planos de la vida o, mejor dicho, en los planos que hayamos determinado que son los óptimos. Cada cuál tendrá sus inclinaciones y sus diferentes planos de abundancia, pero está claro que hay ciertos planos en los que siempre es positivo ser abundante, como pueda ser el económico y el relacional. También el espiritual es muy importante, por lo menos para mí.
Para finalizar te deseo gran abundancia en aquello que sea mejor para ti y que la logres cultivar gracias a una autoeducada y refinada atención creciente.
Ian